¿Qué evitarías comprar si pudieras regresar al pasado? ¿Alguna vez te has arrepentido de una compra?
Si bien es cierto que comprar puede ser uno de los más agradables placeres de la vida, si no elegimos bien lo que compramos, puede convertirse en un verdadero dolor de cabeza.
Afortunadamente siempre existen algunos recursos para saber si es que estás realmente haciendo gastos absurdos o poco estratégicos. Uno de ellos es que te preguntes: ¿qué evitaría comprar si pudiera regresar al pasado?
Si al hacerte esa pregunta te llegan a la mente una larga lista de compras, entonces esta guía es para ti.
Evita comprar cosas de las que te arrepentirás.
¿A quién no le gusta ir caminando, de paseo por una galería o centro comercial, ver un artículo que te llama la atención y comprarlo sin mayores problemas?. A todos nos gusta comprar. Sin embargo, es muy común que luego sintamos que la compra no era tan necesaria.
Una de las principales razones esta ligada con una carencia posterior ya que, después de la compra, puede que sientas que ese dinero te ayudaría ahora en este momento de necesidad, de forma que probablemente sumarías esos artículos a tu lista de ¿qué evitarías comprar si pudieras regresar al pasado?
Para evitar este sentimiento de culpa en el futuro, lo más recomendable es que te preguntes si REALMENTE necesitas ese producto o servicio antes de comprarlo.
La frugalidad conduce al ahorro.
Muchas de las personas más ricas del mundo no siempre fueron ricas, y no son pocas las experiencias relatadas por algunos multimillonarios que nos dicen que comenzaron con muy poco. ¿Cómo lo hicieron? En principio, no gastando más de lo que producían, pero eso no es todo. Además, llevando una vida frugal, pudieron ahorrar un pequeño capital y con ello lograron iniciar su negocio.
Si consigues ahorrar parte de tus ingresos y no gastarlo en cosas innecesarias, luego podrás emplear ese dinero en generar una nueva fuente de ingresos, construir un pequeño negocio y, quién sabe, hacerte multimillonario.
La sencillez de los multimillonarios.
Si te fijas, los verdaderos multimillonarios son personas sencillas, frugales, sin demasiadas ostentaciones. Mark Zukenberg siempre viste zapatillas y pantalones vaqueros, incluso dicen que asiste a algunas reuniones en pijama. Elon Musk no exhibe mayores lujos. Eso es porque tienen claro que la verdadera riqueza no está en el gasto y en la opulencia, sino en la producción, la inteligencia y el ingenio. Por lo general, las grandes ostentaciones de riqueza conducen a la quiebra, por eso los grandes multimillonarios son personas sencillas.
La clave del éxito.
A veces queremos parecer más de lo que realmente somos y por eso gastamos nuestro dinero en cosas banales. Queremos parecer prósperos, y entonces nos compramos vistosas joyas que no necesitamos o nos compramos el último traje de moda para impresionar a una persona especial. Si bien es cierto que estos gastos a veces son muy agradables, y tener el dinero para hacerlo siempre es mejor que no tenerlo, quizás estos gastos puedan representar un problema económico.
«Nos gastamos el dinero que no tenemos en cosas que no necesitamos,
para impresionar a las personas que no nos importan».
¿Los podemos evitar? Claro que sí. Solo es cuestión de enfocar el gasto en lo que nos aporta más beneficios del coste que nos supone.
La clave del éxito no está en cuánto se gana, sino en cómo se gestiona.
En el momento que invertimos nuestro dinero y hacemos que trabaje para nosotros, estamos haciendo que éste se multiplique. Si, por ejemplo, nos queremos ir de crucero, en lugar de pagar el viaje a plazos y coger una «deuda mala», esas cuotas las podemos invertir en generar una nueva fuente de ingresos que, cuando nos aporte la cantidad necesaria, nos permitirá pagar el crucero sin endeudarnos y, además de disfrutar del viaje, el activo que creemos nos seguirá proporcionando ingresos.
Cuando quieras hacer un gasto,
crea antes el activo que te proporcione el ingreso necesario.
¿Cómo verías esa compra en el futuro?
Todos sabemos que volver al pasado no es una posibilidad. Sin embargo eso no significa que desde ahora en adelante no puedas comenzar a hacer las cosas de manera diferente.
Si realmente quieres comenzar a ahorrar, a invertir y llevar unas finanzas saludables, pregúntate: ¿lo que quiero comprar me va a ofrecer más beneficios que el coste que me supone?
Si crees que se trata de un capricho, algo fugaz, algo que no realizará ningún aporte importante a tu vida, entonces ahórrate el gasto. Evita dolores de cabeza a tu futuro y desiste de esas compras innecesarias. Ya verás como en el futuro te lo agradecerás al encontrar un lugar más conveniente donde invertir tu dinero.
Si te interesa controlar mejor tus gastos, te dejamos este artículo del blog que te puede ayudar:
Llevar un mejor control de los gastos.
Esperamos que esta información haya sido de tu agrado.