Probablemente ya te habrás dado cuenta que en 2.022 España viene siendo noticia por alcanzar sus niveles de inflación más altos desde 1.986 de forma que, en estos momentos de dificultades, muchas personas comienzan a preguntarse: ¿cómo influirá todo lo que está pasando a nivel internacional en la inflación y cómo influirá ésta sobre las finanzas?. Y lo más importante: ¿cómo se puede sobrellevar la inflación con inteligencia financiera?
Lo cierto es que la inflación no tiene porque ser mala, pero sí requiere de ciertas precauciones y cuidados. Si te preocupa que este periodo inflacionario golpee la economía de tu hogar o impacte negativamente en tus inversiones, en este articulo te contaremos todo lo que tienes que saber sobre la economía inflacionaria.
1. Evita que la inflación licúe tus ahorros.
Uno de los fenómenos con los que nos encontramos durante los periodos inflacionarios es que todos los precios comienzan a subir, o por lo menos, así es como lo siente la mayor parte de la población. Pero lo que en verdad ocurre es que la moneda pierde su valor y por eso cada vez se pueden adquirir menos bienes y servicios.
Es por eso que, si se tienen excedentes de dinero, lo mejor siempre es invertirlo y resguardar su valor en bienes más estables.
Algunas opciones pueden ser comprar oro, mercaderías que precisemos a futuro, o incluso invertir en activos que consideremos que aumentarán de precio.

2. Evita las inversiones que requieran de un consumo elevado.
Si ya tienes una cartera de inversiones consolidada es importante poder revisar que no vaya a incluir activos que puedan ser especialmente golpeados por la actual crisis inflacionaria.
Para ello hay que tener en cuenta cuáles son los bienes y servicios que la gente deja de consumir cuando debe «recortar sus gastos».
Por ejemplo: se espera que la industria sufra especialmente el aumento del coste de la energía, mientras que las empresas exportadoras de Gas Natural Licuado se verán muy beneficiadas tras las sanciones impuestas a Rusia. En este punto siempre es muy importante mantenerse informado y saber que, ante la duda, siempre se puede resguardar el valor de los ahorros en recursos naturales como el oro.
3. Más que nunca, evita los caprichos.
Si bien puede resultar muy fácil acostumbrarse a comprar más cosas, muy rara vez las personas están preparadas para comenzar a comprar menos. Y es precisamente eso lo que ocurre cuando la inflación comienza a deteriorar nuestro salario.
Sin darnos cuenta, aunque nuestro salario sea el mismo, podemos comprar menos cosas y, si no logramos ajustarnos a nuestro nuevo presupuesto, resultará muy fácil caer en un déficit insostenible.
Por eso resulta muy importante empezar a reducir los gastos antes de que precisemos contraer deudas para sostener nuestro nivel de vida.
Con el tiempo, y en la medida de que nuestro poder adquisitivo se recupere, podremos recuperar nuestra calidad de vida. Pero si la sostenemos pese a una merma de nuestro poder adquisitivo, comenzaremos a gastar nuestros ahorros o acumular deudas en nuestras tarjetas.

4. Aprovecha las oportunidades.
Por último, es importante prestar atención a las oportunidades. Durante los periodos de crisis, los precios suelen fluctuar con mayor velocidad de lo que acostumbran, hasta que vuelven a encontrar su punto de equilibrio.
Es por eso que muchos inversores logran sacar provecho de las crisis, comprando barato y vendiendo caro, aprovechando los tiempos del mercado.
Por supuesto que esta clase de operaciones implican un mayor riesgo, pero está claro que se pueden obtener importantes beneficios.
Y hasta aquí nuestro articulo de hoy. Te invitamos a leer los distintos artículos de este blog, en el que compartimos contigo conceptos y herramientas que te permitirán llevar una economía saludable, pese a las crisis.